Para cenar esta noche os recomendamos sin duda el Camaruco (calle Sarmiento). Ojo de no saltároslo, porque el local no está bien señalizado, una pizarra en la calle os indicará que está abierto. Sólo tienen una mesa para hasta 7 personas y el mismo dueño os indica el menú que tiene esa noche. Cocinarán lo que pidáis en el acto para vosotros. Todo está hecho con ingredientes locales, destacando las ensaladas y los platos preparados con carne de lama (como la pasta rellena). Saldréis por menos de 120 AR$ por persona.
Si preferís algo más convencional, ir al Manantial del Silencio (km 3,5 de la Ruta Nacional 52, podéis llegar a pie). Un restaurante situado en el hotel del mismo nombre, con muy buen servicio y vistas panorámicas a los cerros. Se come también comida tradicional y cada plato os saldrá por unos 95 AR$.
Después podéis ir a tomar una cerveza a uno de los locales más animados del pueblo, El rincón de Claudia Vilte (calle Libertad), lugar de reunión de las peñas norteñas donde diferentes músicos regionales tocan en vivo gran parte de la noche. Si es época alta se puede llenar tanto de turistas que pierde un poco el encanto pero ambiente no os faltará