Qué comer y beber en Argentina

Qué comer en Argentina:

Argentina es uno de los países del mundo donde mejor comeréis y, en la mayoría de las ocasiones, además pagaréis muy poco comparado con nuestro país.

Su plato más famoso son los asados, aunque normalmente los argetinos los preparan en sus propias casas cualquier día festivo o cuando tienen algo que celebrar. En todo caso, en sus parrillas podréis probar todas sus famosas carnes. El asado de tira, las entrañas, el vacío o churrasco, pero de todos estos cortes el mejor con diferencia es el Bifé y el Ojo de Chorizo. Aunque la palabra "chorizo" puede confundir, no tiene nada que ver con el embutido. Se trata del filete o solomillo, la mejor carne posible. Como a los argentinos les gusta la carne bien hecha, muchos la piden tipo "mariposa". Es decir, abierto para que no sea tan grueso y nunca quede roja por dentro.

¡Cuidado al pedir el punto de la carne! Para ellos "al punto" es hecha, así que siempre pedirla menos de lo que os gusta (y si viene demasiado cruda siempre podréis pedir que os la haga más, pero no al revés).

En las parrillas es típico acompañar la carne con provoletas, acompañadas de pimiento morrón asado y también con pancetta.

Otras carnes famosas argentinas por su herencia italiana son las milanesas. Hay auténticos sitios donde las podréis probar de todo tipo. En el Planificador os indicaremos dónde podéis ir para tomaros la mejor milanesa de Buenos Aires.

También por la gran cantidad de inmigrantes italianos que recibió Argentina, encontraréis sitios donde bordan la pasta, especialmente la rellena. ¡No dejéis de probarla! También las pizzas son algo que debéis probar, aunque en Argentina normalmente son del tipo gruesas.

Para comer rápido y barato, los argentinos tienen las "minutas", una especie de platos combinados que más de una vez os irán bien para gastar poco y no perder demasiado tiempo. También para comer algo más de tipo tapa, tienen las famosas picadas: combinaciones de embutidos, aceitunas y quesos que traen en tablas para compartir con un poco de pan.

Sobre los dulces, para desayunar tienen sus "medias lunas", croissants un poco más pequeños de lo normal. Y de postre, los argentinos son unos fans de los helados y en general de todo lo dulce. Aquí tenéis que probar su famoso dulce de leche (leche condensada al baño maría con caramelo), una bomba de calorías que bien lo vale, y los panqueques, una especie de crepe normalmente dulce pero que también puede ir con salado.

Panqueque es el postre con el que la madre de Mafalda siempre le hace chantaje para que se acabe la sopa ¡Con esto está todo dicho!

Qué beber en Argentina:

A estas alturas todo el mundo ya ha oído hablar de los vinos argentinos, especialmente de la zona de Mendoza. El tipo de uva que abunda más es el Malbec, aunque nosotros preferimos el Merlot (difícil de encontrar en Argentina, aunque en Chile sí que cultivan este tipo de uva) y el Cabernet (más abundante). Como suele pasar, es tanta la oferta y tan atomizada que es imposible recomendar buenas marcas de vino porque difícilmente las encontraréis en todos los sitios.

Por eso la mejor recomendación que os podemos dar es que lo habléis tranquilamente con el maitre. Decidle el tipo de uva que os gusta, si sois más de afrutados o de barrica (no hace falta que seamos como Parker, con alguna indicación simple tendrán más que suficiente) y el nivel de precio. Siempre os aconsejarán, la mayoría de las veces mejor que bien. Sólo que insistáis un poquito, además, lo más probable es que os ofrezcan probarlo antes de lanzaros a la botella entera. ¡Y si no os lo ofrecen directamente, no os cortéis de pedirlo!

Y si seguís teniendo dudas, en Argentina en casi todos los sitios tienen medias botellas o vino por copas, así que os saldrá mejor no arriesgaros e ir sorbito a sorbito que pagar la botella a lo grande.

En todo caso, en Argentina la alternativa al vino es una buena cerveza que suelen servirla super fría. En nuestra opinión, tienen una de las 5 mejores del mundo: la Quilmes. Servida en muchos sitios en botella-garrafa de 600ml, ideal para una comida o para compartir. ¡Siempre sale muy económica y, aunque parezca mentira, tiene mejor sabor!