Monta tu viaje con nuestras rutas

Como cualquier otro título, el de viajado suena pretensioso pero nada más lejos de nuestra intención. Entre viajero y viajado hay la misma diferencia que entre cocinero y cocinado. Mientras uno tiene la sartén por el mango, al otro lo han pasado por el fuego. Viajero es el que viaja y viajado es al que le han pegado varios viajes, y nosotros, después de tres meses, queramos o no nos hemos ganado a pulso el diploma de viajados. Justo lo que hemos tardado en aprender lo que no sale en las guías y que nadie te contará. Aquí están nuestras mejores recomendaciones para quien quiera dar la vuelta al mundo:

1. Nunca compres billete de ida y vuelta. Aunque parezca mentira, al final te saldrá más caro.

2. Por muy auténtica que parezca, deja la mochila en casa. En todos sitios podrás arrastrar el trolley y, cuando no, siempre habrá alguien dispuesto por unos céntimos a llevarte la maleta en sus hombros.

3. Siempre que te ofrezcan comida gratis come todo lo que puedas, en el avión o en el bufet del hotel. Y si puedes guardarte un huevo duro para después, mejor. Nunca sabes lo que te espera.

4. Pregunta siempre cómo ir de un sitio a otro. Te perderás igual pero al menos tu pareja no podrá tirarte en cara eso de “ya te dije que era mejor preguntar”.

5. Si no tienes nada limpio que ponerte y te sientes ridículo con lo que llevas, di que estás dando la vuelta al mundo. Todo el mundo piensa que no podemos llevarnos camisetas para todos los días. Como si no hubieran lavanderías por el mundo…

6. Siempre que veas un baño o agujero similar aprovecha para vaciar. ¡Nuncas sabes cuándo tendrás otra oportunidad!

7. Si entras en una tienda y tu pareja se prueba algún trapo, no dejes que se vaya sin quedárselo. Un año entero oyendo eso de “tenía que habérmelo comprado” se hace muuuuuuuuuuy largo.

8. Aunque vendan agua en cada esquina, lleva siempre una botella contigo. Cuando estés muerto de sed, todos esos vendedores que ahora te agobian desaparecerán como por arte de magia.

9. Cada mañana roba papel higiénico del hotel. Si no lo utilizas, al menos podrás cambiarlo por agua.

10. Y sobretodo nunca, nunca, nunca te apuntes a una excursión organizada. Y menos en China. En la única visita que hicimos en grupo todos eran turistas chinos menos nosotros. Hartos de pararnos en más tiendas que por Navidad, Pedro acabó pidiendo a la chica de al lado que tradujera sus palabras al resto. El motín del autocar no había hecho más que empezar…