El mejor “heuriger” de Viena en Grinzing «

Reinischgasse 3

No sé si lo mejor sería traducirlo por “winery”, porque por en el sur de Europa no suelen haber este tipo de sitios. Mentira, en la Toscana conocemos un par de villas fantásticas, rodeadas de viñedos, donde los embutidos que te ponen casi le hacen sombra a la copa de sus deliciosos vinos. Los heuriger austriacos son más caseros, sin perder el encanto pero sin llegar a ser tan informales como los garajes de los “guachinches” en Tenerife (tenemos alguno en nuestra lista para chuparse los dedos…).

Se trata de pequeños viñedos familiares que, para promocionar su propio caldo, empezaron a servir copas de vinos. Después los acompañaron con algo de picar, quesos, emutidos y algunos “spread”. Y ahora casi son restaurantes. Sin el “casi” encontraréis unos cuantos pero ni los miréis. O se han prostituido o ya nacieron torcidos. Los auténticos cuesta encontralos y nosotros tuvimos la suerte de dar con uno de ellos. Una de las zonas más típicas para ir a heurigers cerca de Viena es Grinzing. Lo bueno es que con el tranvía 38 llegaréis directamente en unos 40min como mucho. Bajad en la última parada y os sentiréis como en un pueblo.

“Heuriger” significa “este año”, una especie de “beaujoleu” austríaco y la mayoría de ellos sirven el vino en sus “courtyards”, algo parecido a un biergarden. Sin embargo, si camináis un poquito más podréis llegar hasta el mejor de todos: Zawodsky, en Reinischgasse 3. Es un poco difícil de encontrar y quizás tendréis ganas de dejarlo estar. Más todavía si llegáis hasta la puerta porque para nada es apetecible. No!!!! De las mejores experiencias en Viena. Entrad dentro y, si queréis, primero id al jardín por la izquierda de la casa. Sólo con ver las mesas de madera repartidas entre los viñedos y las fantásticas vistas como si estuvierais en medio del monte, tendréis claro que habréis acertado. El vino os lo servirán en la mesa, la comida la tendréis que coger vosotros mismos en el piso inferior de la casa. Comprada a peso como si estuvierais en una charcutería podréis elegir entre varias opciones, pero siempre os saldrá barato (de 2.20 a 2.80 la copa de vino embotellado, el de garrafa la mitad de barato y la comida por 10 € por persona tendréis más que suficiente).

En la Smart Route os comentamos más detalle, os decimos cómo llegar y los vinos que vale la pena probar, pero en todo caso no dejéis de ir!